3 mar 2012

¿Eres feliz?


Y si tu respuesta es negativa, entonces tu pregunta es, ¿qué cojones estoy haciendo? Porque, cariño, esto te lo habrán dicho mil veces, la vida es un segundo, pasa en un pestañeo y si tú no controlas la tuya, ¿quién lo va a hacer por ti? No dejes que la rutina se apodere de tu día a día, no, porque la vida, la muy puta, no nos devuelve nada, el tiempo que pierdas, las oportunidades que no aproveches y los trenes que salgan de la estación, no volverán. Nunca. Y dime, amor, ¿por qué no persigues tus sueños? Porque de eso todos tenemos, lo que nos diferencia es los huevos que le echamos para conseguirlos. Y sí, tienes razón, nadie dijo que iba a ser fácil, y realmente no lo va a ser. Pero cuando llegues la meta comprobarás que todo, absolutamente todo, ha merecido la pena. La vida está llena de malos momentos, de piedras que estorban en el camino. Y vivir es el arte de aprender a esquivarlas. Alguien dijo alguna vez que no hay un día tan malo que no tenga nada bueno. Y esa es la realidad, ahora solo tienes que quedarte con esas cosas buenas de forma que cuando dentro de unos años vuelvas la vista atrás compruebes que no has perdido el tiempo y que vas cargado con millones de sonrisas. 

1 comentario:

Mònica C. Vidal dijo...

que grandes y sabias palabras.
(la vida en un minuto, se pasa tan deprisa, por si acaso disfruta, corre que me da la risa)